Castigan a interno amarrándolo en una columna

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Un video de 40 segundos realizado por enardecidos vecinos de una casa de rehabilitación, muestra la forma como un interno recibe castigo por sus consejeros. Amarrado en una columna de la parte trasera del establecimiento, se escuchan gritos de desesperación y dolor.

 

Semejante a una película de terror, se ha convertido esta casa de rehabilitación ubicada en el A.H Antonio Marino, en el interior del km 7 de la CFB, donde el responsable del lugar, justifica está acción como un acto de disciplina a los que alguna vez, estuvieron en las calles consumiendo estupefacientes.

 

UNA PESADILLA

“Auxilio, me duele. Ya no aguanto más”, son los gritos que se escucha de un interno de esta casa de rehabilitación. Mientras que los vecinos registran en video a un hombre amarrado en una columna y a otro, aparentemente, recibiendo maltrato físicos, al parecer por personal encargado.

 

“Les amarran para castigarlos”, manifiesta un vecino, añadiendo que es una práctica diaria, aunque uno de los atribuidos negó los cargos que les imputan los curiosos. Pero, los lugareños ya están cansados y por ello, decidieron hacer público su denuncia.

 

Así es, cansados de los constantes gritos de auxilio de los internos de la casa de rehabilitación de nombre Ejército de Rescate “Impacto Divino”, decidieron denunciar manifestando que durante días, los internos les lanzan a sus huertas, varias hojas de papel, escrito de puño y letra, solicitándoles ayuda.

 

Aparentemente reciben maltrato físico, una situación que ha desatado una ola de críticas y cuestionamientos, que si bien es cierto, son personas que han estado sumergidos en las drogas, son seres humanos que merecen recibir ayuda psicología, porque con maltratos, lejos de educarlos, les formarán potenciales agresores o personas de mal vivir.

 

Estos vecinos con el propósito de ayudar a estos jóvenes ante los gritos de auxilios, logaron realizar una filmación, donde se observa a una persona atado de mano, en todo el sol, este se queja de dolor, pide auxilio ante la mirada atónita de sus compañeros que al parecer, temen auxiliarlo.

 

RÉPLICA

Ante la denuncia pública realizado por los vecinos de la zona acudimos a la casa de rehabilitación, donde el director de esta casa, Richard Vieti, justificó el accionar que fue un acto de castigo aun interno como medida de educación.

 

Negó que maltraten a los internos, manifestando que a todos les disciplinan con respeto y amor a su prójimo, y atribuyó un acto de denigración a la buena reputación que ha logrado Ejército de Rescate “Impacto Divino”, y finalmente, pidió disculpas a los vecinos de la zona. (Miller Murrieta)

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