Descubren nueva especie de sapo

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En un reciente estudio publicado en la revista científica Salamandra, biólogos peruanos dan a conocer una nueva especie de anfibio, Rhinella chullachaki, hallado en la Cordillera Azul, en el departamento de Huánuco; además reportan el estado de los sapos del género Rhinella de esta zona del país.

La investigación fue liderada por Ernesto Castillo Urbina tesista de postgrado e investigador del Departamento de Herpetología del Museo de Historia Natural de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y de la Asociación Grupo Rana, y participó el Dr. CésarAguilar, jefe del departamento y docente de la UNMSM.

La investigación comprendió el estudio del estado de los sapos del género Rhinella recolectados en el sur de la Cordillera Azul.

Durante el trabajo de campo en noviembre de 2019, descubrieron individuos de Rhinella en esta región, los cuales, por su morfología general y hocico muy protuberante, fueron inmediatamente reconocidos como similares a algunas especies del grupo Rhinella festae; sin embargo, datos morfológicos y moleculares, proporcionados en la investigación evidenciaron que estos especímenes representan un taxón no reconocido del grupo R. festae y que se describe en la investigación como una nueva especie.

La nueva especie Rhinella chullachaki se distingue, morfológicamente, de todas las especies peruanas del grupo R. festae (R. chavin, R. manu, R. nesiotes, R. lilyrodriguezae y R. yanachaga) principalmente por la ausencia de tímpano y anillo timpánico; el tímpano en los sapos se muestra como una membrana externa de forma ovalada cercana a los ojos.

También es reconocido por su protuberante ‘hocico de tiburón’, llamado así por la orientación, hacia adelante y ligeramente hacia abajo, de su hocico. Molecularmente, se distingue por una divergencia genética sustancial en el fragmento del gen del ARNr 16S mitocondrial estudiado.

El nombre dado a la nueva especie hace referencia al mito del Chullachaki, una criatura mítica dela región amazónica peruana y brasileña que vive en la selva, que tiene la capacidad de convertirse en cualquier criatura y protege el bosque castigando a las personas que actúan imprudentemente en él.

En las representaciones del Chullachaki lo muestran con una nariz grande, por esta razón eligieron el nombre, explican los autores, y también como un llamado a un tratamiento más respetuoso y sostenible de los bosques peruanos.

En la investigación participaron también los investigadores de Alemania: Dr. Frank Glaw delZoologische Staatssammlung München; Dr. Miguel Vences del Instituto Zoológico, TechnischeUniversität Braunschweig y Dr. Jörn Köhler del Hessisches Landesmuseum Darmstadt. (FIN) NDP/ MFA

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